El coito tiene muchas aplicaciones. En el planeta laboral puede realizarse como inversión, soborno, pago de deudas o cancelación; por acoso sexual o para poder acusar tras abuso sexual. Puede recomendarse asimismo como tratamiento terapéutico para eliminar tensiones, afirmarse personalmente, si es satisfactorio, y prosperar la comunicación. En las relaciones de pareja puede usarse para mostrar el poder, ofrecer sumisión, lograr regalos y para modificar una decisión. En definitiva, puede servir como moneda para todo tipo de intercambios comerciales. Y es que los juguetes eróticos (y esa concepción de los mismos, por fortuna, también está cambiando) no sirven solo para disfrutar de la sexualidad a solas. Asimismo sirven para gozarlos en pareja. Un dildo puede valer para masturbarse, pero también a fin de que nuestra pareja nos masturbe mientras, por poner un ejemplo, estimula oralmente nuestro clítoris. Un plug, por poner un ejemplo, puede servir para que nuestra pareja estimule nuestra próstata mientras que nos realiza una felación. Los sexólogos, además de esto, animan a usar los juguetes sexuales en pareja y, al hacerlo, esgrimen una serie de razones.
Acabo de llegar a tu ciudad y no sé a lo largo de cuánto tiempo permaneceré en ella. Soy una persona libre a la que le agrada volar. Si deseas compartir mi nido, llámame. Desde él ascenderemos hasta las cimas más altas del placer. Para los que quieran continuar explorando esta problemática sugerimos ver la película Doña Flor y sus 2 maridos. Un marido provee protección, alimentos y es buen compañero. El otro provee buenos genes, mas es dominante, violento, mal compañero y sería inaguantable como marido. Esto es porque esta clase de intercambio de energía es sutil. Bastantes personas no lo aprecian la primera vez pues por norma general su enfoque sexual es tener una experiencia alucinante y extática, y si no es de esta forma, no es bueno. Debe refinar sus gustos a todos los aspectos del acto sexual y querer las experiencias sutiles y extáticas, del mismo modo que puede refinar su gusto y estimar una variedad más amplia de alimentos. No te rindas tras la primera experiencia; necesitas practicar la dedicación diaria a lo largo de por lo menos una semana para estimar sus efectos. Practica por una semana sin eyacular y pronto comenzarás a sentir la energía.
Introducid mensajes sobre el sexo en las conversaciones rutinarias sobre otros temas
Dame tu teléfono. Ya. Si no, te parto la cara dijo el más bajo de ellos. Le dio su móvil y se fue corriendo, dejándome allá, sola con mi bolso y un pequeño imbécil diciéndome. Ahora te toca a ti, bonita. Irónicamente, después de que me separé de mi ex esposa (no por los inconvenientes con el sexo), por último pude admitir que tenía un inconveniente, uno serio que precisaba solucionar. El día que lo admití es un día que recuerdo más meridianamente que el día en que finalmente perdí mi virginidad. Fue un día de perros, además de ser un día fabuloso. Fue terrible por el hecho de que, al aceptar que en realidad tenía este problema, asimismo me di cuenta de que debería haberlo aceptado ya antes, muchos años ya antes. Me senté allá y pensé en todas las mujeres que me habían dejado frustradas, chillando en silencio que no podía hacerlo. ¿Cuántos de ellos les contaron a sus amigos, personas con las que solía socializar? Trabajando coordinadamente con más de veinte socios internacionales, Baci Lingerie consigue, gracias a esa red sincronizada de colaboradores, llevar su filosofía a todos los territorios de repercusión de forma simultánea. Y, cuando charlamos de todos los territorios de influencia estamos, realmente, hablando del planeta entero. Un plan de marketing y venta moderno y agresivo logra que los productos Baci tengan una visibilidad sin parangón en el mercado. Dos salas de exposición permanentes en USA (una en todos y cada costa, una en Miami y la otra en Los Ángeles) y una serie de tiendas monomarca en Alemania, Emiratos Árabes Unidos y los países escandinavos lo demuestran.
No se precisa ser muy inteligente para percatarse que este tipo de relación no es lo mejor para que el amor, la comprensión, la amedrentad y la profundidad florezcan entre la pareja; no obstante prácticamente toda las sociedades incitan este género de relación (el matrimonio) y es que mediante institucionalizar la relación, a través de volverla un contrato social, religioso, cultural, etc. se gana la estabilidad de la pareja. El matrimonio es la piedra sobre la que descansa la sociedad, sin el matrimonio no es posible tener la sociedad como la conocemos en la actualidad. Con lo que no importa si hay que sacrificar al individuo en el proceso, no importa si hay que sacrificar el amor en el proceso, no importa que tu relación se vuelva desganada, rutinaria, sosa, no importa que estés reprimido y sintiéndote culpable si haces cualquier cosa que no sea aprobada en este tipo de vínculo.
Fernando: eso de salir con alguien sin entablar una relación, en verdad no lo comprendo
Parentar una indiferencia y desapego emocional, muy singularmente cara aquellos sujetos que pudieran estar en su punto de mira. Todo el truco se encuentra en que la meta jamás se entere de esto, pues arruinaría toda la estrategia de la presumida. Con un inocente e ilógico desenlace, llegas a la conclusión de que si tus necesidades no fueron tan esenciales, tampoco . Ésta es la base de tus traumas. Generalmente, un hombre enclenque piensa que no es tan importante o bien bueno. A resultas de la incapacidad de reparar, agradar o bien cuidar a uno o 2 padres, muchos hombres desarrollaron un arraigado sentido de incompetencia. Asimismo, piensas que has de ser capaz de hacer todo el trabajo. Sin embargo, nunca parece que lo haces bien ?la madre prosigue deprimida, el padre prosigue grave. Este sentido de ineptitud se desarrolla hasta la edad adulta. Quieres compensarlo tratando de hacer todo bien. Esperas que haciendo eso, nadie encontrará lo inútil que eres. O quizá ya te diste por vencido ya antes de intentarlo. Por consiguiente, no es de extrañar que tantos hombres nos comuniquen que en sus familias, simplemente, nunca se hablaba de estas cuestiones. Por consiguiente, las ganas de saber, las dudas y las preguntas en torno de la sexualidad no tenían un espacio donde ser tratadas. De este modo, la poca información relacionada con la sexualidad que se iba consiguiendo procedía de fuentes que no garantizaban en absoluto contestaciones claras y objetivas: amigos de la calle que, a su vez, hallaron exactamente las mismas respuestas unos años ya antes y de otros amigos mayores, los curas de parroquia cuando se pertenecía a grupos de catequesis y los escaso blogs o bien gacetas de contenido seudocientífico que podían circular por aquel entonces.
Soy educada, elegante y con clase, sensual y atrevida
Cuidar la estética es una necesidad. El de qué forma se charlan, de qué manera se miran, de qué manera miran a otros, cómo pelean cuando pelean, qué se afirman cuando se dicen, de qué forma se visten, de qué forma se maquillan, cómo se cuidan. La estética en todo tiene un papel protagonista en esta relación. Sin tregua. El principio de comodidad empieza por el hecho de que la pareja se sienta cómoda con alguien presentable a su lado, seguido por dosis de empatía que le permitan a uno regular el impacto de sus palabras y ademanes en el otro. Si mirarás a una tía buenísima que justo ha pasado por vuestro lado, no lo hagas con descaro y si lo haces díselo a tu pareja. Perdón, ¿de qué manera has dicho?. Que sí, mujer. Yo le digo a mi chica: Fíjate en esa tía cómo marca curvas, y ella me lo reconoce pues es obvio. ¿Y ya está? ¿Tu chica se queda tan apacible?. Claro. Puedo mirar a una tía cañón, pero no intimar con ella, ni lo pretendo. Del mismo modo mi pareja con un tío macizo. Eso no lo hacemos día a día ni a cada minuto, claro. Y los dos conocemos el amor que existe entre nosotros, no lo ponemos en lona de juicio por eso. Si eres respetuoso, ¿por qué no vas a compartir una obviedad en un instante determinado?. Vale, vale, será cuestión de probarlo
Tal y como hemos comentado en el punto anterior, si verdaderamente quieres tener pareja tu objetivo tiene que ser alcanzable. Si en tu lista pones varón, 72 kg y 1,80 metros de estatura, y no eres absolutamente honesto o bien sincera en lo que pides, probablemente estás perdiendo por el camino a multitud de hombres que, aunque pesen un poco menos o bien un poco más de 72 kg, podrían cumplir tus expectativas en aspectos considerablemente más interesantes. Cierto es que el ejemplo es un poco exagerado, pero no penséis que se aleja tanto de la realidad de ciertas personas. Nunca nos cansaremos de alabar el encanto de lo teen. ¿De qué manera no hacerlo en el momento en que nos hallamos frente a una jovencita morbosa y tentadora como Amaia? El semblante de Amaia nos hace meditar en el morbo de la falsa inocencia; sus pechos, en la deliciosa naturalidad de la fruta fresca; su cuerpo entero, en el paraíso que siempre queremos recorrer y por el que tantas veces soñamos perdernos. Ahora podemos hacerlo. Ahora podemos recorrer esa piel fresca y sedosa. Ahora vamos a poder emborracharnos con el néctar de esos labios. Ahora vamos a poder fascinarnos con el tacto y la visión de las redondeadas nalgas de esta muñequita española. Amaia, dulce y lujuriosa, nos ofrece la ocasión de tocar el cielo con las manos y de degustar los matices más variados del placer erótico. ¿La vamos a desperdiciar?
En los años 90, el preservativo recibió el reconocimiento oficial. En diciembre de 2005, el obelisco de Buenos Aires amaneció forrado con un enorme condón de color rosa. Se celebraba Día Internacional de la Lucha Contra el Sida y, con él, la resurrección de un profiláctico que jamás debió morir. Los médicos de los siglos XVIII y XIX emitieron asimismo consejos a fin de que las mujeres concibiesen o no, conforme el empleo que hicieran de este procedimiento. En el siglo XVIII, el holandés Boerhaave y el suizo Albrecht von Haller coincidieron en que la mujer tiene mayor tendencia a concebir al final de la regla, al paso que, ya en el siglo XIX, el zoólogo francés Pouchet señaló que la concepción se puede hacer únicamente entre el primero y el duodécimo día después de la regla.
